En la vida cotidiana del soltero hay muchas actividades a realizar. Puedes ir a tomar cafés con los amigos, de viaje, salir de copas y fiesta por la noche, de compras, ir al cine, o simplemente un paseo solitario sin rumbo fijo. Ya sé que estos planes también son compatibles con la vida en pareja, pero en este blog nos centramos en la gente soltera, ¿no?
Ahora, de todos esos planes, quedémonos con el de salir de fiesta por la noche. Este ritual, como tantos otros, suele estar muy pautado: primero cenas en casa, o bien quedas para cenar en un restaurante con los amiguetes; seguimos con las primeras copas de la noche, mezclada con una charla sobre cómo ha ido la semana; entre frase y frase, evidentemente (y más si eres tío), pones el escáner en modo "searching" para ver cómo está de bien el panorama en cuanto a víctimas atractivas se refiere; comentas la jugada con los amigos; marcas un objetivo; el objetivo pasa de tu culo (como siempre)... En fin, son cosas obligadas en una salida nocturna de un soltero.
Vaya como vaya la noche, puedes verte en cualquier momento charlando con una desconocida, o bien con alguna conocida habitual de ese local al que tanto vas. La conversación fluye, es entretenida. Y tras un largo "bla bla bla"... ella ve que se lo está pasando bien, y esa sensación se le transmite a todo el cuerpo, a modo de baile desenfrenado. Y en ese momento, mientras me coge de las manitas, hace un intento para que yo baile con ella. A mí no me apetece, motivo por el cual ella ve que lo único que se mueve de mi cuerpo serrano son mis manitas y los brazos pegados a ellas. Cabeza, tronco, cintura, cadera, piernas y pies se mantienen anclados, estáticos. Mi cara esboza un gesto que dice por sí solo "no me apetece bailar". Sin embargo ella insiste (segunda insistencia... y para mi gusto la que debería ser la última), y me dice "baila conmigo". Entonces le digo claramente que no me apetece. Ella me dice que no sea soso, que muchas veces me ha visto bailando. Le digo que tiene razón. En ocasiones me gusta bailar, pero le matizo que me gusta hacerlo solo, a mi rollito. No se me da bien bailar en pareja. Ella insiste, diciéndome que no importa que no sepa. Yo le digo que ya no es cuestión de que no sepa. Es cuestión de que NO me apetece, tal y como le he dicho al principio.
Entonces ella se pone de morros, no sin antes insistir por enésima vez. Es en ese momento donde sin pensarlo le suelto "...¿follamos?". Ella se queda a cuadros. No puede creer lo que le he dicho. Se lo repito. ¿Follamos? Ella, flipando, me dice "... ¿tú estás tonto? No vamos a follar...".
Su reacción es justo la que yo esperaba. Así que le digo "... Ok. Pues no follaremos, porque a ti no te apetece. Lo respeto. Así que de la misma manera, si yo te digo que no me apetece bailar en ese momento, no me toques más los huevos, y respeta también mi decisión..."
Esta historia que acabo de contaros, en realidad, no ha pasado. Pero tened la certeza de que en breve ocurrirá. Porque me he visto en esa situación muchas veces, y un día no podré aguantar más con ese tipo de chicas pesadas que no respeta mis decisiones (y seguramente las de nadie), y soltaré todo eso por la boca. Y si ocurre, no sufráis, que os lo contaré...
A partir de hoy, novedad en el post del jueves: intentaré darle banda sonora a los posts. Para hoy os recomiendo el clásico "Respect", de Aretha Franklin.
Patronio, a tus pies! Bra-vo
ResponderEliminarMireia? Eres tu? Ya sabes que contigo si que me pego bailoteos de perreo maximo, jejeje.
ResponderEliminarPatronio, sí, soy Mire Singlelist! Je,je.
EliminarVamos nuestros bailecitos de perreo que no nos los quite nadie :)
hahhahah, muy bueno!
ResponderEliminaraunque....si un tio se pone pesado y le digo follamos hay muchos puntos que diga que si! o eso es lo que decias todos que cuando una tia quiere follar folla.
EliminarMirska yo creo que no se lo creería que le dijeras eso y alguno perdería la oportunidad!! jajaja por lelo!
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